Para Lorca, todo estaba hecho con
líneas claras; todo sin ninguna ambigüedad. En su poesía hay que interpretar con la razón natural, pero aun más con los sentidos, con los sentimientos profundos de un gran
poeta.
Él mismo diría y yo transfiguro con
mis leves palabras, las de un gran admirador de su genial obra: <<Las plazas de las charcas verdes son la convivencia de la gente sencilla, con la inteligencia y la alegría que desprenden
por doquier>>